Los estudiantes de la UE Siglo 21 se lucieron en el inicio de clases

(ARGENTINA) – Hace unos días, el aula magna de la carrera de Publicidad de la Universidad Empresarial Siglo 21 (Córdoba) abrió las puertas a los estudiantes de primero a cuarto año de su licenciatura y lo hizo con una bienvenida a cargo de la mentora de la carrera, Fabiana Renault, en teleconferencia con el director Rodolfo Bellomo y con el responsable de PRIMER BRIEF, Pancho Dondo, quien luego brindó a los chicos un taller sobre inspiración. En la nota, parte de los resultados de uno de los ejercicios más interesantes de ese taller.


En la primera y en la última fotos, los estudiantes durante el acto; en la segunda, Fabiana Renault conversando vía Skype con Bellomo y Dondo; y en la tercera, el director de PB durante su taller.

 
POR PANCHO DONDO
Director de PB
(Fotos: Prensa UE Siglo 21)

 
El afiche de convocatoria al acto del miércoles 20 de marzo.

Los viajes largos, accidentados y colmados de imprevistos suelen ser los que nos dejan una marca en la piel. Nunca olvidaré aquel viaje en tren a Bariloche, a mis 20 años, que en lugar de durar 22 horas duró 36 y que incluyó, gracias a una locomotora muerta definitivamente poco después de pasar San Antonio Oeste, un multitudinario fogón de varias horas al costado de la vía y la salida de la luna llena sobre la Patagonia al son de no sé cuántas guitarras y gargantas que no dejaban de descender de todos los vagones.

Sin embargo, los viajes fugaces pero redondos, aceitados y nutritivos también dejan una carga importante en nuestra mochila de recuerdos, probablemente por razones opuestas. Y algo así fue el delicioso paseo que un miércoles de fines de marzo tuve el privilegio de realizar por las afueras de la ciudad de Córdoba; más concretamente, por el envidiable campus que la Universidad Empresarial Siglo 21 tiene en las afueras de la capital, justo enfrente del aeropuerto provincial.

El día, que había arrancado con una llegada en colectivo de línea (el eterno 160) hasta el Aeroparque Metropolitano, incluyó, tras un vuelo perfecto, una inspiradora caminata entre el Aeropuerto Ingeniero Aeronáutico Ambrosio L.V. Taravella y el mencionado campus de la universidad, una impactante recorrida por todos los rincones del campus bajo la guía del inoxidable Rodolfo Bellomo (responsable de la carrera de Publicidad de la UE Siglo 21 desde su misma creación), un almuerzo rodeado de estudiantes, el reencuentro casual con algún lector de PRIMER BRIEF a quien ya había visto en otro evento, una prolija prueba audiovisual ya sobre el escenario en el que se realizaría la presentación y una tranquila espera a la llegada de todos los estudiantes, algo más de cien, que para las cinco de la tarde ya estaban terminando de acomodarse en el aula magna de la universidad.

Participar, sin haberlo previsto, del acto oficial de bienvenida a los alumnos de primer año fue una sorpresa interesantísima, y mucho más lo fue asomarse a la intimidad que existe entre la mentora de la carrera, la incansable Fabiana Renault, y la Siglo (apodo que conocí justamente gracias a ella).

Tras ese diálogo y la excelente presentación de la revista Cartelera, realizada por estudiantes de la carrera, lo que siguió fue mi propia disertación sobre la búsqueda de la inspiración, o —como el mismo Bellomo explicó en el afiche de convocatoria que puede verse más arriba— sobre cómo «observar la vida cotidiana para encontrar ideas que nacen de la calle, de la gente, para inspirar ideas que sirvan a las causas de la publicidad». Y lo más interesante de ese taller fue obviamente lo generado por los propios estudiantes, cuando en varios ejercicios les propuse mirar a su alrededor en busca de imágenes nuevas o bucear en sus adentros para encontrar nuevas combinaciones de palabras y de conceptos.

Consigno a continuación uno de esos ejercicios, y sus resultados.

 
LAS SEIS PALABRAS DE ERNEST HEMINGWAY


El escritor estadounidense Ernest Hemingway (1899-1961).

 
La anécdota cuenta que, un día de 1920, Ernest Hemingway apostó a varios de sus colegas 10 dólares a que lograba crear uma historia completa en sólo seis (6) palabras. Cuando el autor de El viejo y el mar les enrostró su «For sale: Baby shoes, Never worn» (En venta: zapatos de bebé, sin uso), sus amigos debieron pagar. Más de una vez se ha dicho que, desde ese día, Hemingway sostuvo que aquella había sido su mejor creación.

A partir de esa notable creación, muchísimos bloggers de todo el mundo, principalmente angloparlantes, impusieron en la web la costumbre de escribir algo que resulta un desafío casi mayor: autobiografías en seis palabras.

Y eso fue lo que les propuse a los estudiantes cordobeses, quienes en pocos instantes comenzaron a disparar una tras otra las frases que copio aquí, elogiadas por mí al punto de preguntarles: «¿No les parece que acá hay muchísimo mejor material del que uno suele encontrarse en Twitter?».

Van las autobiografías en seis palabras de dos docenas de estudiantes de Publicidad de la Universidad Siglo 21:

1) Quiso ser feliz, pero se casó.
2) Yo vivo, yo sueño, yo intento.
3) No tengo inspiración sin un sánguche.
4) Vine muy temprano, ahora tengo hambre.
5) Si no resisto, desisto pero insisto.
6) Con hambre no se puede pensar.
7) Quise volar alto. El avión falló.
8) Sobra el tiempo, falta con quién.
9) El sol mañanero siempre te encandila.
10) Sólo yo sé dónde quiero llegar.
11) Este lunes NO empiezo la dieta.
12) Llegó tarde. Seguro tomó el A5.
13) Pienso la frase, pero no sale.
14) Siempre busco, no encuentro, pero sigo.
15) El tiempo me persigue, es ahora.
16) Mi mamá me dijo que soñara.
17) Tengo hambre, tengo sueño, tengo necesidades.
18) Todos quisimos volar antes de tiempo.
19) Vendo ataúd por cambio de planes.
20) Imposible cambiar si no hay ganas.
21) Mañana es jueves, empieza el finde.
22) En un mundo redondo nací cuadrado.
23) Imposible ver el día de noche.
24) Arranqué muy temprano: pásenme un mate.

Para destacar: la número 19, la brillante autobiografía del ex suicida. Gracias, Córdoba; gracias, querido Bellomo; gracias, UE Siglo 21. Y sigan buceando adentro y afuera: los publicitarios no podemos darnos el lujo de que algo no nos interese.
 
 

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