Matías «Mackenzie» Quiroz dice: No sos vos, son ellos

(ARGENTINA) – Desde su ya clásico espacio mensual, y con la franqueza que ya volvió marca propia, Mackenzie continúa reflexionando y haciéndonos reflexionar cómo hacer que una idea se vuelve memorable para la gente. Y para eso, nada mejor que volver a una década inolvidable de la cual todavía hay que seguir aprendiendo. Egresado de Under, redactor en la agencia digital Coupé Buenos Aires, ganador en Diente 2015 y, desde hace un tiempo, columnista de PRIMER BRIEF: Matías Mackenzie Quiroz te acerca mensualmente sus Mackenthings para contarte todas las cosas que vive y piensa acerca de la publicidad.

columnademackenziesobreogilvy-580px
«El consumidor merece respeto», decía David Ogilvy en su momento. Hoy, «Mackenzie» Quiroz lo reitera.

 
TEXTO POR MATÍAS «MACKENZIE» QUIROZ
Redactor de Coupé Buenos Aires
Redacción especial para PB

 
Ogilvy, antes de ser una de las agencias más importantes de la galaxia, fue un hombre. David. Un tipo que publicó por primera vez a los 29 años, y sin embargo es conocido como el padre de la publicidad moderna. Un tipo del que aprendí muchas cosas (que debería repasar, admito), pero una en particular: el consumidor merece respeto. “Tu esposa es un ‘consumidor’”, advirtió David a sus lectores, en Confesiones de un Publicitario. «No le mentirías a tu esposa. Por favor, no le mientas a la mía». El consumidor merece respeto.

Y me parece muy curioso que, por un lado, tengamos al creativo más influyente de la historia de la publicidad, sosteniendo semejante revelación; y por el otro, una industria egocéntrica que busca su satisfacción por sobre todas las cosas, para la que el consumidor no es más que un mero espectador, a menos que le sea funcional. Entiendo que en el fragor de la batalla, apasionado, uno pueda tener la sensación de que el publicista es quien decide qué va a comprar la gente, hacia dónde va el mercado, o qué va a ser lo próximo en viralizarse. Pero la verdad es que quien hace, deshace y decide hacia dónde tenemos que ir, desde el principio, es el consumidor. Sin embargo, amamos decir que somos el nexo entre las personas y las marcas, quienes decodifican y traducen las necesidades de los unos y los otros a fin de suplirlas, aportando creatividad multiforme que hace universal las palabras de nuestros representados y tocando las fibras más íntimas de su target, conmoviéndolo hasta la reflexión; para no admitir que solamente somos mensajeros.

Debe significar algo que los creativos más exitosos que conocemos sean personas que se corren del foco y vuelven protagonistas a las personas. Que no tienen la cabeza metida en el manualsito que se armaron (todos nos armamos uno), sino en el mundo que los rodea. En lo que pasa con las personas en el mundo real.

Qué sería de nosotros si trabajáramos para comunicar de la mejor forma, en lugar de para que todo el mundo vea que fuimos nosotros los que comunicamos tal o cual cosa de tan espectacular manera. Si al fin y al cabo brindamos un servicio, por qué no decidirnos por servir y servirles para algo a las personas para las que trabajamos.

Mi amigo, quiero para vos lo mismo que para mí. Que puedas encontrar, más que tu inspiración, la solución a sus problemas. Que puedas ver al consumidor, al tipo que likea los posteos que pensás, y no ver una ganancia, sino una oportunidad para transmitir algo valioso. Ver, como David, que esa gente merece respeto, y no que insultemos su intelecto. Que puedas entender que no se trata de vos. Y ser libre.

Mackenzie
 
 

3 replies »

Responder a Carlos Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.