(ESPAÑA) – Luego de estudiar en Brother Buenos Aires y regresar a Europa para trabajar como redactora, la creativa empezó a desarrollar Cuando nos puede el divineo, un lugar virtual donde pudiera compartir con sus lectores sus experiencias sobre lo que hacen las mujeres para “estar bonitas y sufrir, sobre todo sufrir”. Hoy, Alma cuenta la historia de su período en la Argentina y cómo creó el blog que suma cada vez más lectores.

A la izquierda, Alma en Brother Buenos Aires; a la derecha, en la agencia española Gete Comunicación.

 
POR JOSÉ ESCANÉS
Redactor de PB

 
Más de una vez nos hemos enterado de que un creativo de publicidad está detrás de una página de internet. Por eso no es sorpresa que Alma Gomis, redactora publicitaria, sea quien escribe el blog “Cuando nos puede el divineo”: con su propio estilo, creó este espacio en el que revela, de la forma más divertida, cosas que ella y las mujeres viven a diario.

El blog empezó a sumar cada vez más lectores, Alma continuó escribiendo en él mientras continuaba de día su trabajo de agencia y PRIMER BRIEF no dudó en hablar con ella para saber cómo combina la publicidad con sus demás proyectos.

-Estando en España, ¿por qué decidiste estudiar en Brother Buenos Aires?
-Estaba terminando la carrera y tenía claro que quería ser copy (*), pero no tenía el portfolio para presentarme en una agencia. Y como siempre me había hecho ilusión ir a la Argentina, busqué en Google “master de copy en Buenos Aires” y salió Brother. Me gustó la web, escribí, y Mauro (Suárez) me contestó enseguida con toda la buena onda que tiene. Y dije “pues me voy, ya está”.

-¿Cuál fue tu experiencia en Brother Buenos Aires?
-Para mí, es lo que más me ha enriquecido personal y profesionalmente. Lo bueno de Brother es que conoces a gente de todos lados. Encuentras diferentes países, diferentes culturas e incluso diferentes formas de hablar la misma lengua, y eso te hace ver cómo es el mundo. Además aprendí cómo funciona la publicidad y cómo podemos a llegar a las personas a través de ella. Fue lo que realmente me ha hecho persona dentro de este mundo de la publicidad.

-¿Recordás las clases de algún profesor en particular?
-Sin duda a Juan Rezzónico, tanto profesor como amigo durante todo el año. Siempre estaba con nosotros y era uno más. Fue con el que te vas de allí, por decirlo de alguna forma. Seguimos hablando con él, e incluso hemos ido a verle durante viajes. Y Mauro, después de tantos años, se ha convertido en otro amigo y en un apoyo.

-¿Qué hiciste después de terminar el curso anual de Brother?
-Terminamos en Brother Buenos Aires, volvimos, y en un mes entramos con mi dupla en Grey Barcelona para trabajar con la cuenta de Seat. Un año después nos pasamos a Gete Comunicación, donde hacemos marketing digital, marketing directo y comunicación de branding.

«Es una página que muestra una realidad de las mujeres, pero además el drama que hay detrás», explica Alma.

-¿Cómo nació tu blog Cuando nos puede el divineo?
-Mientras llevaba las redes sociales de la agencia y hacía un curso de community manager, me dieron ganas de montar algo propio. Desde que estábamos en la escuela y hacíamos pequeños briefs (como crear un corto sobre cómo sería tu último minuto de vida), me preguntaba cómo sería crear una página que me divirtiera, que fuera puro entretenimiento. Siempre me han llamado la atención los blogs, por lo que quería tener algo así. Algo que me divirtiera a mí, con mis propias normas y que me apeteciera ver.

-¿Cómo se lo describirías a alguien que no lo ha leído todavía?
-Para mí es una página que muestra una realidad de las mujeres, de cómo ser presumidas, pero además el drama que hay detrás de ello. Te diría que es un sitio para chicas que apetecen reírse de ellas mismas; especialmente en ese momento en el que están con una mascarilla natural y el pelo pringado, en su casa y no saben dónde sentarse. Es un blog para presumidas que tienen ganas de reírse de ello. Lo curioso es que el público masculino también da Me Gusta en la página. Supongo que es porque también se ríen de la situación: nosotras nos empeñamos en estar divinas, pero cuando tenemos el pelo desecho, más podemos gustar. Es la paradoja entre “quiero ser presumida” y “quiero estar en pijama en casa”.

-¿Por qué creés que es importante tener proyectos afuera de la publicidad?
-Porque te ayuda a salir de la rutina. La publicidad es un trabajo divertido, y siempre nos dicen que tenemos que vivirlo con pasión, pero al final es un oficio. Y como todo oficio, hay puntos que se repiten y que pueden hacerte caer en vicio. Estas cosas te ayudan a desinhibir tu mente y marcarte objetivos para ser cada día mejor, porque si cada día haces lo mismo, te aburres.

-¿Qué es lo próximo que te gustaría hacer?
-Me gustaría editar el blog como un libro con mucha dirección de arte, de esos que te da gusto tener y ver de vez en cuando. También quisiera hacer más proyectos digitales, como una miniserie o ilustraciones. Y quizás las muñecas de Cuando nos puede el divineo, que serían un gran regalo de navidad.

 
(*) Redactora, según el slang español de no traducir esta palabra del inglés, pero tampoco decirla completa (que sería «copywriter»).