(ARGENTINA) – Julia Kaiser no es extraña a Primer Brief. Antes de aparecer hoy como entrevistada fue columnista de nuestra revista. Desde sus palabras nos contó su experiencia desde dentro del Account Planning Boot Camp de la Miami Ad School, pero hoy regresa para contarnos, entrevistada por nuestro redactor Denis Vivoda, sobre cómo esa experiencia la llevó hoy a entrar a Young & Rubicam, como la flamante nueva incorporación al departamento de planning.

Julia Kaiser, del Account Planning Boot Camp a Young & Rubicam Buenos Aires.

TEXTO POR DENIS VIVODA
Redactor para PB
(Fotos: Gentileza JK)

 
—¿Qué te llevó a meterte en la publicidad?
—Estaba en el anteúltimo año de la secundaria, y empecé a buscar algún lugar donde poder canalizar lo que yo quería hacer, periodismo, pero el día a día de esa carrera no sé si me cerraba tanto. No me gustaba el hecho de que se trataran trivialmente algunas cosas serias, y viceversa. Entonces me pareció que la publicidad era donde podía canalizar mi creatividad, siendo que además no me iba a encontrar con esa cosa del periodismo que me causaba algo de bronca.

—¿Trabajaste en alguna agencia antes de Young & Rubicam?
—El primer trabajo que tuve relacionado a la carrera fue en Grey. Entré al área de cuentas porque quería entrar a una agencia como sea. Estaba en la facultad y quería saber cómo era ese mundo.

—¿Y siempre quisiste ser planner?
—No, en realidad quería ser redactora (risas). Pero bueno, en su momento quería ver cómo era la vida en agencia, así que dije “bueno, me meto en donde haya lugar”, como para ver también las diferencias entre la facultad y la vida real. Y ahí fue donde descubrí el planning, porque en la facultad no se hablaba mucho de eso. El equipo con el que trabajaba en Grey usaba mucho lo que es planning, y cuando había que ayudar yo ayudaba. Esa fue mi primera experiencia con el planning. Empecé a ver lo que era, y me empezó a gustar, y empecé a decir “bueno, quizás va más por acá”. En esa época yo ya estaba haciendo una especie de Cultural Street Caper para The Future’s Company. Todo al mismo tiempo, la facultad, Grey y eso. No dormía mucho en esa época (risas).

—¿Cuánto duró esa experiencia?
—Estuve en Grey seis meses. Después me fui a The Future’s Company a tiempo completo, y eso mientras seguía en la USAL. Ahí estuve dos años y medio, hasta el año pasado. Tuve un año que estuve haciendo freelance, con The Future’s y haciendo algunos trabajos de redactora en medios. Y después bueno, me llegó esta propuesta de Young.

—¿Cómo te enteraste de Miami Ad School?
—Por un tweet de alguien, no me acuerdo de quién. Me dio curiosidad, lo abrí, pregunté. En ese momento yo vivía en La Plata, trabajaba acá, por lo que los horarios eran súper incompatibles, así que no fui a Miami entonces, fui más adelante. Pero gracias a eso conocí The Future’s Company, empecé a trabajar como Cultural Street Caper. Más tarde me llamaron y empecé como analista, y estuve los dos años ahí como “analista de tendencias”. De esa experiencia la verdad es que aprendí un montón y estuvo buenísimo.

—¿Cómo fue la cursada en contraposición con la facultad?
—En la facultad nadie hablaba de planning, así que es muy fácil establecer qué cosas aprendí en el Boot Camp que no aprendí en la facultad: todo. Imaginate, pasás de no conocer ni la palabra a tener clases con planners que ejercen de eso, a conocer sus experiencias, y a practicar con ellos cerca, porque las clases teóricas son bastante prácticas. Había un abismo entre la facultad y Miami Ad School. Haber tenido esa experiencia me sirve mucho ahora.

Julia Kaiser, durante una presentación en el Account Planning Boot Camp.

 
—¿Cuál dirías que es la ventaja de Miami Ad School?
—Es lo más parecido que podés tener a la vida real. Está buenísimo porque después no te encontrás con ese abismo que te podés encontrar cuando salís de la facultad y entrás en agencia, como me pasó cuando entré a Grey mientras estaba en la facultad. Estás mucho más preparado. La gente que te evalúa es gente que está en agencias. Los clientes para los que presentás son clientes verdaderos. Miami Ad School combina lo mejor de una escuela, y lo mejor de una agencia. Sentís la libertad de cometer errores y de estar aprendiendo, como en una escuela, pero a la vez tenés a las personas y al ambiente de una agencia.

—Hace poco entraste a Young & Rubicam. ¿Cómo fue el primer día o las primeras semanas?
—Todavía estoy acomodándome con el equipo, pero fue buenísimo. Estuvo la adrenalina que te agarra cuando entrás a un ambiente que no conocés. Creo que se puede resumir en eso, la adrenalina de un desafío nuevo. Imaginate, el primer día tuve una reunión importante, así que ya empecé con todo. Estoy entusiasmada, y sigo estando entusiasmada, y sé que me queda mucho por aprender.

—Qué consejo le darías a alguien que recién está entrando al planning?
—Que sea muy curioso, que se mantenga siempre atento, a lo que ve alrededor, a lo que ve en la tele, a las conversaciones que escucha de la gente, todo puede servir como material. Y bueno, que haga de eso un ejercicio, ser observador, ser analítico.

—Qué consejo te darías a vos misma antes de empezar la carrera?
—»Relajate» (risas). Sí, ese tal vez sería el consejo que me daría. Suelo ser medio overthinker, pero un consejo sería relájate, y otro sería “no te conformes, seguí buscando, seguí aprendiendo”.

Sus últimas palabras parecen contradictorias, me remarca Julia una vez que termina la entrevista y las tazas de café ya están vacías. Pero después de todo, pienso, la publicidad no es famosa por hacer una y otra vez lo mismo. Siempre se dice que para lograr resultados distintos no sirve hacer siempre lo mismo. Y Julia, así como la publicidad que la formó, lo sabe muy bien: todo cambio es útil, incluidas las contradicciones.