(URUGUAY) – La sede uruguaya de la escuela de creativos Brother está cumpliendo diez años. PRIMER BRIEF entrevistó a sus dos directores académicos, Martín Rumbo y Guillermo Giordano, y publica de paso el video que la escuela preparó para este aniversario.

Rumbo y Giordano, directores asociados de Brother Montevideo desde hace seis meses: «Nuestra principal meta es formar a los mejores estudiantes-profesionales del mercado, como desde hace diez años, y a la vez seguir siendo un lugar dentro de la cotidianeidad donde las ideas se encuentran»..

 
POR PANCHO DONDO
Director de PB
(Fotos: Prensa Brother)

 
PRIMER BRIEF: ¿Dónde y cuándo se formaron como creativos publicitarios?
Guillermo Giordano: En el año 2000, en Universidad ORT, comencé estudiando producción audiovisual, luego seguí por publicidad. Después de terminarlas ambas carreras, en 2004 comencé a armar mi carpeta en Brother.
Martín Rumbo: Si bien yo estaba cursando la licenciatura de comunicación, el lugar donde me encontré con la publicidad fue en Brother. La Escuela me enseñó a pensar en publicidad y a quererla.

PB: ¿Cuándo y en qué agencias empezaron sus carreras profesionales?
GG: La primera fue la agencia que actualmente tiene mi padre en el interior del país. Luego en Montevideo fui socio tres años de una boutique creativa llamada Wok. Cuando abandoné ese proyecto ingresé a Da Vinci Publicidad, después pasé a Grey Uruguay y actualmente estoy en Punto Ogilvy.
MR: Después de terminar la Escuela y mi carpeta , entré en Garage, mi primera agencia de publicidad. Aún le guardo el mayor de los cariños. Pasé un año y medio allí; desde entonces trabajo en Young & Rubicam.

PB: ¿Cuánto hace que dirigen académicamente Brother Montevideo?
GG: Si bien hace cinco años que trabajamos juntos empujando a la Escuela, la dirección es reciente: hace seis meses que la asumimos. (Al respecto, ver nota Brother Montevideo tiene nuevos directores asociados).

PB: Los dos han sido alumnos: de escuela primaria, secundaria, quizás terciaria, de lo que sea. Seguramente cada uno atesora una anécdota ocurrida en una clase que recuerda con especial cariño y le hace pensar ¡eso es lo que yo quiero que ocurra en Brother Mvd! ¿Podrían contar esas anécdotas?
GG: Las mejores anécdotas de la escuela para mí fueron los recreos. Si hay algo que me gustaría que pasara en Brother, es que la gente se sienta en recreo mientras piensa una idea. Creo en el aprendizaje a través de lo lúdico, creo en la diversión, creo en la libertad, y sé que las mejores ideas están donde cada uno se siente más cómodo. Por eso me gustaría que la escuela sea un recreo, un oasis del asfalto donde ir a compartir experiencias, anécdotas y distintas formas de ser. Un lugar donde llevar lo que tenés adentro y dejar que lo demás te llegue a vos.
MR: El recreo. Siempre me caractericé por ser un poco inquieto. Un día en tercero o cuarto de escuela pedí para ir al baño. Desde mi salón para ir hasta allí tenía que pasar por la puerta de la Dirección obligatoriamente. Pasé y como vi que no estaba la directora entré e hice sonar el timbre que marcaba el recreo una hora antes. Los gritos de toda la Escuela retumbando en las paredes no los olvido más. Fueron cinco minutos eternos de bullicio y sentimiento de libertad hasta que llegó la directora.

PB: ¿Cuál piensan que es la principal virtud docente de cada uno?
GG: La credibilidad. Es un trabajo apasionante dictar clases, traspasar tu conocimiento a otro, explicar lo que sentís y lo que la experiencia te ha dado. Lograr comunicarse hasta ser comprendido es uno de esos esfuerzos lindos que nos toca vivir cada vez que empieza la clase. Con el tiempo la escuela te enseña. Uno no nace con la experiencia de dictar conocimiento, lo vas desarrollando con el tiempo. La tarea como profe va creciendo con los chicos, ellos año tras año también te van enseñando cómo debés ser mejor. La virtud es crecer y avanzar, saber aprender de las experiencias que cada año te deja e implementarla al año siguiente.
MR: La frontalidad, aunque pese. En todo ámbito donde se exponen ideas y uno se expone junto a ellas, se necesita confianza en el otro para poder recepcionar de forma sincera todos los aportes que una idea puede llegar a tener o el simple consejo de abandonarla. Enfrentar todos los años a setenta nuevos alumnos es una gran desafío que asumo con mucha responsabilidad y alegría a la vez. Otra “virtud” o meta personal es no ser igual a los profesores que alguna vez que me crucé e intentar ser el profesor que alguna vez tuve ganas de tener.

PB: ¿Cuál es el perfil que intentan darle a Brother Montevideo como espacio de formación y crecimiento?
GG: Asumir la dirección tiene, entre muchas cosas, el replanteo de todo. La escuela cumple diez años, eso significa mucho camino recorrido, mucha experiencia ganada acerca de lo que está bien, lo que está mal y sobre todo, cómo podemos hacer las cosas mejor. En nuestro mercado, sólo Brother puede brindar eso a los alumnos, y es justamente sobre eso en lo que estamos trabajando. Una escuela de ideas. Eso es lo que buscamos. Expandir el formato publicitario, salir de los lugares establecidos. Buscamos ideas potentes y luego resolvemos en qué medio pueden aplicar mejor. Buscamos problemas de comunicación y no paramos hasta encontrar la mejor forma de solucionarlos. ¿Es la mejor manera una pieza de TV, prensa, vía pública, radio, internet, BTL? Lo importante siempre es el proceso hasta llegar a una solución nueva. En eso trabajamos en cada clase con los alumnos.
MR: “Brother me cambió la vida”, si bien parece un frase más que armada y creada por nosotros, a todos los que hacemos o formaron parte de la Escuela en algo nos la cambió, y esa frase la podemos escuchar cada vez que termina un año. Nosotros no queremos cambiarles la vida a las personas, sino que ellas encuentren en la Escuela recursos para seguir formando pensamientos que logren un cambio. En sus vidas, en la publicidad, donde ellos lo necesiten más. Nuestra principal meta es formar a los mejores estudiantes-profesionales del mercado, como desde hace diez años, y a la vez seguir siendo un lugar dentro de la cotidianeidad donde las ideas se encuentran.

PB: De las instalaciones de Brother Montevideo, ¿cuál le resulta el rincón más inspirador a cada uno? ¿Podrían mandar una foto de cada uno de esos rincones?
GG y MR: Los que enviamos son dos rincones representativos para los dos. Por un lado, el del sillón es nuestra oficina para conversar ideas con los chicos, es nuestro lugar de reuniones. Y la otra foto, la de las revistas, es más conceptual, se refiere a la búsqueda y discusión de ideas. Resumiendo, ambas fotos son nuestros rincones favoritos.

PB: ¿El ingreso de qué ex estudiante de Brother Mvd a qué agencia les provoca especial orgullo a los dos?
GG: Es difícil elegir uno, dos, incluso es difícil nombrar a una generación mejor que la otra. Los logros de los alumnos, en alguna parte, también los sentimos como nuestros. Solemos decir que la Escuela te cambia la vida, por eso nos podemos alegrar por todos los que están viviendo la vida profesional que eligieron.
MR: Si me tengo que quedar con un solo lugar, me quedo con el salón de clase. Es un lugar genial, se vive, se siente. Sólo los que pasaron por la Escuela pueden llegar a entender lo que se puede llegar a vivir en ese lugar. Y el segundo es la sala, con su sillón naranja. Es un lugar que utilizamos para charlar mano a mano con cada alumno, para saber cómo está, qué siente y qué quiere. En ese lugar te convertís un poco en psicólogo, en papá, y gran parte en amigo. Una mezcla de sentimientos que hacen de Brother lo que es hoy, la mejor escuela de creativos del Uruguay. Nosotros no sólo dictamos clase, acompañamos el crecimiento de cada alumno que pasa por la Escuela. Esto es un gran valor agregado. Profesores hay muchos, gente que tiene ganas de que te vaya bien, pocos.

 
EL VIDEO

El video que preparó Brother Montevideo para celebrar sus diez años de vida.