(ESPAÑA) – El concurso propuesto por El Sol, el Festival Iberoamericano de la Comunicación (realizado en Bilbao, España, entre fin de mayo y comienzo de junio) tuvo ganadores inesperados en la sección Estudiantes: Joan Marcé Terradas y Gerard Casadevall, alumnos de la hermana menor de la red Brother Iberoamérica, la catalana Brother Barcelona, se llevaron nada menos que el oro. El plata fue para estudiantes de la escuela The College of Everything y el bronce, para una dupla de la Universidad del País Vasco. PRIMER BRIEF dialogó con los ganadores y con Mauro Suárez, el director de la escuela, poco antes de que la sede arranque su tradicional Summer School.
Gerard y Joan en tres momentos del evento realizado en Bilbao: primero, con Antonio Montero, uno de los creativos referentes de la publicidad española, antes de la entrega de premios en la que se impusieron; después, en el escenario, mostrando orgullosos sus premios; finalmente, al cierre del festival, a punto de emprender la vuelta a Cataluña.
POR LEO VIGNATI
De la redacción de PB
A sólo seis de los siete meses que dura el curso de creatividad integral de Brother, una dupla de su primera camada puso a la escuela bajo la lupa de todos al ganar el oro en el concurso que invitaba a pensar un aviso para la bebida tónica Markham.
La dupla ganadora estuvo compuesta por Joan Marcé Terradas y Gerard Casadevall, que cuentan su experiencia a seis meses de haber arrancado el Curso de Creatividad Integral en la sede de Palo Alto.
El spot con que Joan y Gerard ganaron el concurso de El Sol. Sus otros trabajos están en su web.
GERARD CASADEVALL: «DE BROTHER ME ENCANTA LA PROXIMIDAD ENTRE ALUMNO Y PROFESIONAL»
—¿Cómo decidiste estudiar publicidad?
—Soy una persona a quien le gusta y le interesan las artes visuales, amante del dibujo y la fotografía, a quien le gustaría llegar a ser director de arte. Estudié publicidad y relaciones públicas, siempre fijando mi camino hacia la creatividad y la comunicación visual, más que escrita. Al acabar mi licenciatura decidí descubrir mundo y pasé un año en Brasil, primero trabajando fuera del mundo de la publicidad y luego, ya en una pequeña agencia de comunicación. En Brasil también aproveché para viajar y conocer otras facetas lejos de la publicidad como la permacultura.
—¿Cómo llegaste a estudiar en Brother?
—En mi vuelta a Barcelona, descubrí el concurso que buscaba el peor creativo de España. Por suerte no fui yo, pero sí me sirvió para conocer Brother, donde decidí sumarme a la primera generación de nuevos creativos de Barcelona.
—¿Qué creés que te aportó el curso?
—Brother ha sido como una gran montaña rusa: primero, nuevos retos y nuevas experiencias con profesores como Gil Blancafort o Alejandro Arriagada. Pero el hecho de tener profesores que trabajen conllevó a una renovación de profesorado a media temporada. Un pequeño bajón de ritmo, en parte dado por la inmadurez de la escuela. Pero nuevas ideas y nuevos puntos de vista generaron más trabajos, distintos de los anteriores. Lo que más me gusta de Brother es la proximidad entre alumno y profesional, y la autoexigencia que te impones. Tú trabajas lo que quieres según lo que tú mismo creas. Pero tener profesionales a tu lado ayuda a ver que lo que estás presentando tiene que ser bueno o no les sorprenderás. Lo que antes me parecía bueno, ahora necesito mejorarlo mucho. Por mi parte he descubierto cómo hacerlo para conseguir cerrar una pieza y estar orgulloso de ella. También he aprendido ha buscar soluciones creativas fuera de lo común, ya que en Brother no sólo pensamos campañas. Buscamos ideas creativas y esto ayuda a pensar a lo grande, siempre teniendo en cuenta la importancia de la base o el concepto.
Una de las piezas de la dupla: de concientización del peligro del alcohol al volante.
—¿Cómo surge la campaña para Markham?
—Por lo que se refiere la campaña para Markham, intentamos plasmar la idea de que un gin tonic tiene dos bases muy claras: la ginebra y la tónica. Aunque últimamente parezca que algunos expertos quieran confundirnos, la idea base, el concepto era la siguiente frase: «¿Recuerdas cuando pedías un gin tonic y te traían ginebra con tónica?». Con este insight de base y con la premisa de que se trataba de una tónica con orígenes indios, fuimos trabajando la idea. Hasta llegar a la imagen de un bombín y un bigote, que representan la tradición inglesa de la ginebra y la imagen del bindi (el punto en la frente, típico de la India) que hacía referencia a la cultura india. Así pues, unimos la tradición inglesa de la ginebra con la sabiduría india de la tónica.
JOAN MARCÉ TERRADAS: «GANAR EN EL SOL HA SIDO MÁS QUE NADA INESPERADO»
—¿Cómo decidiste estudiar publicidad?
—Pues bueno, un poco sobre mí mismo: nací en 1988 en Esponellà, un pueblecito catalán de no más de 200 habitantes. Y me metí a estudiar publicidad en la Universidad de Girona (años después de haber nacido, obviamente). Me gustaría poder decir que lo tenía clarísimo, que siempre quise dedicarme a la publicidad… Pero fue un poco por eliminación que me acabé metiendo a ello. Y aunque la universidad no me ayudó mucho a convencerme de la decisión que había tomado, sí empecé a divertirme con la publicidad, trabajando con ella y viéndola. Y sobre todo (y no es porque esta entrevista sea para una web argentina) con la publicidad argentina. ¡Recuerdo unos spots de la agencia La Comunidad para el festival de cine independiente de Buenos Aires que me parecieron buenísimos! Aquí nadie hacía ese tipo de spots y aquellos tipos con acento argentino abrazando un cubo rosa gigante que los convertía en albinos fue como: «¡Eso es lo que quiero hacer!». Y nada, después de pasar un año en Australia, volví a casa y me encontré con Brother, con esa escuela argentina que me enseñaría a pensar en cubos rosas y gente albina para promocionar festivales de cine. Así que me decidí a apuntarme para aprender de los que, para mí, saben más publicidad.
Spot «Si no es para vos, no es para vos», el concepto de la pieza que inspiró a Joan a estudiar en una escuela de origen argentino.
—¿Cuál fue la experiencia de estudiar en esa escuela argentina?
—Y, ahora que ya se va oliendo el final del curso de Brother, puedo ya decir que esa sí fue una decisión acertada. Hemos podido trabajar con algunos de los mejores directores creativos y de arte del país y en los seis meses que llevo he aprendido más que en los cinco años que pasé estudiando. No es para desanimar a los que están en primero y les quedan cuatro años más para terminar publicidad: a mí no vino mal tener esa base. Aunque sea una base agónicamente lenta y larga. Brother es realmente algo más que un brief tras otro, sus profesores se implican y eso hace que sientas que te gusta lo que estás haciendo. Al ser un contacto algo más directo con el mundo real, también te llevas tus reveses y tus decepciones, pero de eso va esta profesión, y está bien tener una primera idea de lo que es trabajar en publicidad. Además he tenido la suerte de toparme con un montón de compañeros geniales, con los que comparto no sólo la pasión por esta profesión y que hacen que todo sea mucho más fácil y divertido. Pero como te digo, cuesta sacar conclusiones, porqué todavía nos queda un mes y medio de curso, al que espero sacarle mucho provecho.
Gráfica de los chicos para el clásico escocés.
—¿Cómo fue haber participado en el concurso de El Sol? ¿Cuáles eran sus expectativas?
—Acerca de El Sol, ha sido más que nada algo inesperado. Era un poco el típico concurso al que te presentas sin pensar en que realmente puedes llegar a ganarlo. Así que puedes imaginar la alegría que fue llevarnos el oro. Al tratarse de un brief sobre una tónica premium, se hizo un poco cuesta arriba ver por dónde atacarlo al principio. Hay 3000 tónicas premium en el mercado, todas queriendo decir lo mismo; hablando de las mejores recetas, los pétalos que mejor combinan, las semillas que puedes meterle… Así que dijimos: «Oye, con todo esta parafernalia que hay montada en torno al gin tonic, ¿alguien se sigue acordando de lo que realmente es esa bebida? ¿Os acordáis de cuando pedías un gin tonic y te traían una ginebra con tónica y limón?». Y utilizamos esa reflexión para reflejar la sabiduría típica de la India, de donde procede la tónica.
—¿Qué creés que les aporta haber ganado el concurso?
—Y evidentemente, ¡la experiencia de ganar El Sol fue cojonuda! Fue genial poder pasar el fin de semana en Bilbao rodeados de lo mejor en publicidad y acabar subiendo a recoger el premio. Pero después del subidón, volvemos donde estábamos, sin trabajo. Así que de lo que se trata ahora es de que este Sol nos sirva para darnos a conocer entre la gente que nos tiene que dar trabajo mañana. O mejor hoy. Así que el éxito de esto lo mediré en función de los resultados que seamos capaces de sacarle.
Excelente uso de las bolsas de compras por parte de la dupla.
DIÁLOGO CON MAURO SUÁREZ, DIRECTOR DE BROTHER BARCELONA
—Con los desafíos que todo nuevo emprendimiento debe afrontar, ¿cómo es el balance del primer semestre de esta sede?
—Lo difícil es sostener el discurso en situaciones adversas, mantener el camino sin desviarse de las razones que firmemente creemos con certeza y defendemos contra quien sea, porque en Brother lo que decimos lo practicamos. Por eso el balance de Brother Barcelona es mucho más que positivo, evaluando además la situación coyuntural que vive España. Brother Barcelona ha abierto sus puertas en 2012 con un grupo completo para el curso de creatividad integral de siete meses. La propuesta es muy sólida: hay otra forma de hacer las cosas, por eso los que vengan a Brother que vengan a buscar mucho más que un book express. Desde el vamos apuntamos a eso con todo el equipo de profesores de Barcelona y de Buenos Aires implementando un hashtag como bandera que fue #soloconelbooknobasta. ¡Y un grupo de jóvenes valientes entendieron el mensaje! Comenzamos el 4 de diciembre con una primera generación con el número de alumnos que esperábamos, ni más ni menos. Y es la misma que en este momento se encuentra en el spring final del proceso de cierre de trabajos, ¡la misma que ha ganado en El Sol con sólo seis meses de curso! Y una de las cosas más importantes es que ha sido la generación de todo Brother con menos índice de deserción, algo totalmente relevante. Esto nos demuestra que de verdad los chicos se han puesto la camiseta, sin duda alguna tienen muchas ganas de jugar en primera y saben que pueden lograrlo, hoy se creen totalmente capaces. Por eso comulgamos con un pensamiento que siempre lo citamos y es de Tham Khai Meng, el director creativo mundial de Ogilvy: «Tenemos que crear un mundo en el que la creatividad sea un fenómeno generalizado. Y para eso hay que ser más valientes que nunca».
—¿Qué creen aportar con el curso que ofrecen?
—»Algo debemos estar haciendo bien sin lugar a dudas, algo de nuestro método funciona tan bien que se replica en donde podamos tener la oportunidad de probarlo»: este es un comentario de los tantos que nos hicimos con todo el equipo de Brother, luego de que este pasado fin de semana, y cumpliendo solo 6 meses de vida en España, nos enterábamos que nuestra dupla de Gerard y Joan (de la primer generación de Brother Barcelona) eran ganadores de Oro en la Categoría Estudiantes en El Sol, ¡por encima de todas las otras escuelas de creativos y Universidades de todo el país que hace muchos muchísimos años están en el mercado español! Y si ven la pieza ganadora es una idea que todos pueden hacer. No hay gran tecnología detrás, ni un uso descomunal de programas, ni nada mágico. Sólo un gran concepto. Porque eso es parte de nuestra filosofía: no sirve enamorarse de una idea que después los frustre por no poderla hacer.
—¿Qué tipo de profesionales necesita el mercado español?
—Roy García en una charla TED dijo que el le gustaba comer helado de pistacho por el color, y es eso. El curso de verano de Brother Barcelona es volver a sorprenderse y buscar ese niño que eran, por que seguramente nadie deja de creer en las cosas que creía. Para nosotros esa es la forma de encontrarse con nuevas ideas, con conceptos que solucionen problemas de todo tipo. En el Summer School no estamos detrás de ideas para un guión o un case, estamos detrás de hacer amigos y compartir el talento, de aprender a pensar diferente, les enseñamos a disfrutar de los «NO», y a pensar para hacer la vida mas linda y mejor, por que la creatividad no solo está para hacerle bien a las marcas. Las marcas toman las soluciones a los diferentes problemas y a eso le asignan sus productos, en este caso damos vuelta la situación y en lugar de que el girar entorno al circo les enseñamos a generar que pase totalmente lo contrario. Crear desde sus propias leyes del éxito hasta crear su propio trabajo. Por que quizás afuera no haya trabajo, y eso nadie ni se anima a decirlo.
El afiche promocional del Summer School.
—¿Quiénes son los profes que van a estar en Brother?
—Gracias a Dios hemos dado con un gran equipo que está en estos momentos diagramando todo Brother Barcelona, comprometido e involucrado con lo que decimos. Poniéndole su impronta desde su lugar. Hemos tenido profesores que han colaborado dando clases y que hoy colaboran desde otro lugar y por su parte. Un equipo de profesores del staff permanente que provocan en este tipo de ideas en los chicos de Brother Barcelona. Un sitio donde encontrarse con lo que uno realmente quiere y busca. El equipo de Brother está conformado por Ferrán López en clases de taller creativo, Pipo Virgos (DC de S,C,P,F…) en clases de conceptualización y Nacho Ginestra es el Head of Art de la escuela. A ellos se le suma el plantel de profesores argentinos que cada uno en un momento del curso han venido a dar clases durante todo un mes. Juan Rezzónico (DC de Don Buenos Aires y Dir. Académico de Brother Buenos Aires) y actualmente cerrando sus clases tenemos a Nico Gomez Cal (Lola Madrid). Desde el comienzo contamos con el apoyo de Alejandro Arriagada (DC Grey Londres), Gil Blancafort (Yslandia) y Enric Soldevilla (Dir. de Arte de World of Fans Amsterdam) con lo que hemos abierto camino, junto con la coordinación general de Esther Rubau y la coordinación y producción de Amai Rodríguez.
—¿Qué objetivos a futuro tiene la novedosa sede catalana?
—Estamos en carne viva del desarrollo de la escuela en Barcelona, y este próximo curso Summer School nos dará otras experiencias y por ende otros resultados. En este momento ya estamos casi llegando al número esperado de alumnos para este curso, pero sabemos que esto recién comienza y desde nuestro lugar estamos acompañando a los estudiantes españoles en el amor en tiempos de cólera. La meta está puesta en el lugar que venimos a ocupar y lo estamos haciendo. Porque como te dije al comienzo de la entrevista, creemos en lo que decimos y nos relacionamos con eso, y ese es el gran diferencial de Brother. Por eso este gran premio que hemos recibido en el Sol a través de la dupla de Gerard y Joan ya que sentimos que es el reconocimiento de hacer lo creemos y amamos. Como siempre ¡VISCA PB, VISCA BROTHER!
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