Lina Caicedo, ex-alumna AAP, habla sobre su propia marca: «Fue un reto hermoso»

(ARGENTINA) – Lina Caicedo egresó del Centro de Aprendizaje de la AAP en el 2012 con un sueño a futuro: emprender una línea de ropa propia. En septiembre de 2014 y tras un año y medio de «planificación y educación», esta directora de arte lanzó la marca: Lina Caicedo. Para sus primeras dos producciones de fotos sumó al proyecto a otra ex AAP, Sofía Romano, quien aparece en casi todas las fotos de esta nota.


Sofía Romano y Lina Caicedo en plena producción.

 
POR LINA CAICEDO
Directora de Arte por la Asociación Argentina de Publicidad

 
 
Lina Caicedo es un emprendimiento dedicado a la indumentaria y asesoramiento en imagen personal. La idea surgió unos meses después de terminar la AAP: la moda siempre fue algo que me gustó y sabía que en algún momento iba a hacer algo con eso. Después comencé a meterme en el mundo emprendedor y me di cuenta de que tenía las herramientas, los conocimientos, las ganas y la pasión para poder empezar el proyecto. Finalmente junté todo lo que sabía técnicamente gracias a la AAP con algo que siempre me había gustado, como la indumentaria, y luego de un largo proceso de planificación y educación (alrededor de año y medio) salió por fin a la luz, en septiembre 2014, Lina Caicedo.

La idea principal no es vender «moda»: la idea es vestir a la mujer haciéndola sentir segura de su imagen, de lo que quiere mostar, donde la simpleza juega con la elegancia.

 
Todo esto empezó hace aproximadamente dos años, cuando empecé a sumergirme en un mundo apasionante como es el del emprendedor. Luego de terminar la Facultad sabía que todos los conocimientos adquiridos me daban una base importante para poder iniciar con el proyecto que ya tenía en mente, y así, luego de un largo proceso de planificación, decidí empezar, consciente de que arrancar, tener la iniciativa, es el paso mas importante para todo.

Creo que la pregunta de muchos es qué tiene que ver dirección de arte con moda. Pues bien, la respuesta es sencilla: TODO. Desde el proceso de planificación, la bajada de ideas, el análisis del entorno, las necesidades, el armado de una estrategia, la generación de una imagen, la búsqueda de un concepto, la definición de una marca, la carrera fue fundamental para todo el desarrollo del emprendimiento. Y no solo de este, sino también de Minush, otro de mis emprendimientos dedicado al diseño de almohadones. Y no solo para conocimientos estratégicos, sino también para cuestiones técnicas, como la fotografía, el uso de tipografías, el retoque digital y todo lo que implica para llegar a un producto final.

Ya con casi un año en el camino, Lina Caicedo se encuentra en una etapa de crecimiento, con muchas ideas y proyectos nuevos para su expansión y la generación de una mejor experiencia. Además, a medida que el proyecto empieza a tener aceptación te encontrás con la necesidad de brindar más para poder seguir creciendo.

Personalmente, fue un reto hermoso y lo sigue siendo, en el que tuve llenarme de paciencia, de coraje y de fuerza: esto es como una escalera en la que, con mucho esfuerzo, se va ascendiendo; en ocasiones se desciende, pero nunca hay que aflojar. Creo que algo muy importante también es el amor (sí, el amor), con el que nos comprometemos a hacer las cosas: esa creo que es la clave del éxito para muchas cosas en la vida.

Entonces podría resumir el emprendimiento como la muestra del esfuerzo, la dedicación y el amor para hacer lo que te gusta por vos y para los demás. Eso: un emprendimiento también es el reflejo de nuestra alma, de nosotros mismos como personas y experiencias de vida.

 
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