Nace un Monstro: cómo fue la primera clase de la nueva escuela creativa de Panamá

(PANAMÁ) – Imaginate una nueva escuela creativa que tenga todas las ganas de comerse el mundo. “Monstro nace de un padre, La Necesidad; de una madre, Las Ganas; de una divinidad, El Concepto; y de una bestia, El Profesionalismo”. Así se introduce a sí misma la flamante nueva escuela del Círculo de Creativos de Panamá, que esta semana tuvo su primera clase. PRIMER BRIEF dialogó con los dos profes que la dictaron, Tatiana Farfán y Damián Martínez.


El aspecto que tuvo la primera clase: el taller de Redacción Creativa en el Hotel Panamá. (Fotos de toda la nota: Gentileza Círculo de Creativos de Panamá)

 
POR DENIS VIVODA
Estudiante de redacción publicitaria en la Asociación Argentina de Publicidad
Especial para PB

 
Con ese nombre ya podés saber que se vienen con todo. Este primer taller, que Monstro está realizando en el Hotel Panamá —sede de los tres talleres en total que planea realizar— es de Redacción Creativa. Como los otros dos talleres —Dirección de Arte y Vida digital—, se realizará en el lapso de dos semanas, dos clases por semana —martes y jueves—, y tendrá la duración de tres horas diarias. Todas se encuentran “dictadas por una dupla de profesionales activos en publicidad, reconocidos por su experiencia y talento, premiados internacionalmente y con ganas de compartir su conocimiento”.

Desde PRIMER BRIEF hablamos con “los profes” del primer taller, Damián Martinez Lorenzo —director general creativo de Pisa— y Tatiana Farfán —directora general creativa de McCann-Erickson Panamá— acerca de cómo vivieron el taller desde el frente de la clase.


La foto de portada de la nueva escuela en su Facebook.

 
PRIMER BRIEF: ¿Cómo se sintió saber que es la primera clase de muchas a venir? En cierto modo están haciendo historia.
Tatiana Farfán: Muy emocionada, es un proyecto que hace mucho se había pensado. Le hemos dedicado muchas horas extras, muchas ganas, sólo por el placer de ver crecer a una industria que tiene todo el potencial.
Damián Martínez: Fue un sentimiento muy especial, ya que fue como ver nacer un hijo que veníamos gestando desde hace mucho tiempo. Algunos segundos antes de abrir la boca para decir mis primeras palabras, se me cruzaron por la cabeza un montón de imágenes, entre ellas el momento que elegimos el nombre “Monstro” para este proyecto ya hecho realidad. Por la naturaleza de este curso de redacción, más que hacer historia, preferiría decir que estamos re-escribiéndola.

PB: ¿Qué objetivos querían alcanzar con esta primera clase? ¿Los lograron?
TF: Este primer taller es la punta del iceberg, es el inicio de un gran cambio, un cambio fundamental. Los objetivos eran varios y a todo nivel, desde medir el interés en el tema, pasando por estandarizar conceptos y ayudar a entender la creatividad como una profesión seria con una gran responsabilidad al tener esa capacidad de influencia tan grande. El resultado, cupos llenos y muchos en lista de espera, es un excelente indicador y un maravilloso augurio.
DM: En nuestra primera clase, uno de los objetivos más importantes era que los asistentes sintieran un cambio, un antes y después en su forma de comprender y redactar. En verdad sí se logró, no sólo por lo que nos dijeron al finalizar la clase, sino que se notó en los ejercicios que realizamos.

PB: ¿Qué les dijeron?
DM: Dos cosas fueron las que más me impactaron: la primera, que uno de los chicos me dijo que esa clase de tres horas le había servido más que los cuatro meses que vio de redacción en su universidad. La segunda, que una chica diseñadora me dijo que ahora entendía mucho más a su dupla, que se sintió dentro de su cabeza por un momento y le ayudó a comprender muchas cosas.

PB: ¿Cómo fue para ustedes? Hacemos muchas notas desde la visión de los que participan como oyentes, pero desde el lado de ustedes, ¿cómo se sintió?
DM: Mucha adrenalina, fue como tener que presentar una campaña importantísima frente a treinta clientes que estaban esperando lo mejor de nosotros.
TF: Para mí, el dar una clase, taller o charla es algo muy exigente, no puedes subestimar ninguna pregunta, ninguna idea que surja. Te obliga a ser asertivo, a escuchar diría yo con los cinco sentidos. Son tres horas maravillosas porque con Damián ya hemos trabajado bastante, hacemos un equipo muy bueno, nos complementamos, generamos debate y lo mejor de esa forma de trabajo es que siempre las ideas y los conceptos salen ganando, porque salen fortalecidos. Yo me sentí muy bien; vi caras entusiasmadas, la vibra en el recinto era genial, se sentía la creatividad pululando en el ambiente. Ver tantas mentes queriendo remar para el mismo lado, sentir un interés auténtico y genuino en mejorar el producto creativo es fantástico.

PB: ¿Cómo creen que Monstro puede ayudar al mundo creativo panameño?
TF: Cuando decimos que estamos haciendo historia suena muy ambicioso, para algunos hasta arrogante, pero no tengo duda de que en unos años miraremos atrás y veremos a un mercado maduro en lo que a creatividad se refiere. Quienes estamos en esta industria hemos visto cómo países que le han aportado en la historia reciente a la creatividad, como Colombia y Perú, han impulsado no sólo al sector publicitario, de mercadeo y producción, sino a la economía entera. Esa es la visión, todo logro comienza dando el primer paso, y nosotros ya lo dimos en firme.
DM: Lo más importante es que va a ser un semillero de profesionales más capacitados y que comprenden mejor cómo funciona el mundo publicitario. Y si contamos con ese tipo de personas en nuestras agencias, no tengo dudas de que muy pronto se va a reflejar en la calidad creativa de todo el mercado panameño.


«Una foto que pasará a la historia: Monstro en su primer día de clase», dice la página de Facebook. De izquierda a derecha: Juan Pacho Bernal, presidente del Círculo de Creativos de Panamá; Tatiana Farfán, DGC de McCann-Erickson Panamá; y Damián Martínez Lorenzo, DGC de Pisa. Los últimos dos son la dupla que dicta el taller de Redacción Creativa.

 
«Todo logro comienza dando el primer paso». Y sí, no todos los días podés decir que presenciaste el nacimiento de un Monstro; en este caso, una nueva escuela creativa para una nueva generación de creativos.
 
 

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