(ARGENTINA) – El jueves arrancó la séptima edición del Face to Face, la recorrida de estudiantes por agencias que organiza el Círculo de Creativos Argentinos, en la que cada dupla tiene quince minutos para mostrar su carpeta y recibir una devolución. A diferencia de otros años, el programa no se organizó para visitar agencias tres días seguidos, sino intercaladas, con cuatro y dos días de separación. En este período de descanso fue que nuestro redactor José Escanés preparó su crónica del primer día… y que algunas de las agencias visitadas ya les pusieron fichas a varios chicos.

Recuadro del banner que indicaba el punto de encuentro para F2F en la entrada del Distrito Audiovisual.

POR JOSÉ ESCANÉS
Redactor PB

 
El Distrito Audiovisual, de por sí un punto activo de la ciudad de Buenos Aires, amontonó el jueves pasado un enorme grupo de jóvenes, en los que se notaba, desde la entrada de Dorrego y Zapiola, una mezcla de ansiedad y emoción.

Cualquier peatón palermitano pasaba de largo, pero nosotros nos quedamos para acompañar a estos chicos (todos estudiantes de creatividad en lugares como Brother, la Escuelita, Miami Ad School o Under) en lo que venían esperando desde hacía semanas: el Face to Face.

Para repasar: esta actividad, que el Círculo de Creativos Argentinos realiza desde hace siete años, consiste en que los estudiantes se presenten en algunas de las mejores agencias del país para mostrar su carpeta y obtener una devolución sobre sus trabajos, su nivel de producción y sus posibilidades de entrar al mercado laboral, ese que parece lejano o casi ficticio desde el nombre de una agencia en una ficha técnica, pero que se vuelve realidad cuando llegamos a la primera parada del día.

Micro de por medio para llegar rápido a la Zona Norte del Gran Buenos Aires, el primer lugar a visitar fue TBWA. La que desde afuera parecía una casona con rejas negras fue la agencia donde los DGC Guillermo Castañeda y Juan Cruz Bazterrica, sumados a otros creativos senior, recibieron a los chicos y los atendieron en sus propias oficinas para ver sus carpetas. Las caras a la salida de estas reuniones dejaban en claro que había más aciertos que errores, lo cual calmó las ansias de varios y los preparó para el siguiente destino.

Bastante cerca llegamos a El Almacén, agencia que repitió el truco de la fachada hogareña para esconder un lugar de trabajo donde el ritmo es rápido y las ideas tienen que ser buenas. Por suerte, las que los chicos les mostraron a Walter Onorato y Diego Duprat recibieron el guiño bueno, y ameritó que varios se llevaran las tarjetas de los DGC. Antes de irse, muchos se quedaron mirando fijamente los escritorios de la agencia, pensando que tal vez sean suyos dentro de poco, o capaz sólo haciendo tiempo para no esperar el transporte debajo de la lluvia del día (no voy a decir nombres, pero algunos pegaron siestas express en el micro, por el clima que había).

El último lugar que visitamos antes de cerrar la fecha inicial fue el edificio imponente en el que está BBDO Buenos Aires. Los chicos esperaron en el loft de la agencia, definiendo la estrategia sobre qué trabajos convenía destacar con los creativos de la casa como Joaquín Campins o Juan Ure. Quienes fueron saliendo pudieron respirar un poco más tranquilos y empezaron a instagramear detalles de la agencia, como su panel iluminado con palitos transparentes o un sticker que alguien de la productora Nunchaku dejó ahí (buscalo en las mesas de la cocina). Tan cómodos se sentían algunos, que los ejecutivos de cuentas llegaron a preguntarles si eran juniors nuevos. Al rato de contarles que no, uno de los chicos sugirió: “La próxima, deciles que sí. En una de esas funciona y capaz te contratan”.