(ARGENTINA) – Hace unas semanas te contamos cómo fue la charla abierta sobre Social Media en la Miami Ad School. Después vino «¡Big data for ever!: lo mejor de la charla de Mariano Feuer en la MAS. Hoy te volvemos a traer una de esas charlas ampliada en una nota: la de Bruno Bonafine, «Tendencias en Social Media». Una presentación rápida y directa a todo lo que es el presente de lo que es Social Media y, también, qué se viene.

Bruno Bonafine, primero desde la derecha; otro más de los cuatro fantásticos (conferencistas).
 

TEXTO POR DENIS VIVODA
Estudiante de redacción publicitaria en la Asociación Argentina de Publicidad
Especial para PB

FOTOS POR SOLEDAD CORONEL
Estudiante de dirección de arte en la Asociación Argentina de Publicidad
Especiales para PB

 
El siguiente en la serie de las cuatro charlas en la Miami Ad School es Bruno Bonafine, quien salta adelante de todos tranquilo y con seguridad en lo que va a decir. “Tendencias en Social Media”, dice la pantalla detrás de él. Se mantiene calmado a medida que hilvana sus palabras; es imposible no notar que sabe lo que va a decir. Su presentación es cortita y al pie, por lo que esta nota va a intentar, al menos, mantener su esencia original:

«EL CONTENIDO ES EL REY; QUIEN LO SEGMENTE SERÁ EL AMO»
Bruno nos dice que un mensaje golpea mil veces más fuerte si está bien colocado, y para biencolocarlo hay que segmentar. “Segmenta o muere”: la pantalla lo avala. Hay que customizar, hacer llegar nuestro mensaje a sectores cada vez más pequeños, pero repletos de las personas a las que tenemos que llegar.

«EL ALCANCE ORGÁNICO ESTÁ MUERTO»
La pantalla dice “Pongui Pongui” y todos nos reímos. “Hay que garpar (*), muchachos”, dice Bruno. Eso de llegar a la gente “de manera natural” —bah, con “medios de distribución gratuitos”, como dice Facebook— no existe más: hay que garpar a las redes sociales y garpar en grande. La gente está expuesta en sus timelines a muchísima información, y la información “orgánica” pasa desapercibida. La eficacia de un mensaje pago es muchísimo mayor.

Bruno Bonafine dando la charla: es imposible no notar que sabe lo que va a decir.

 
«MEDIR, MEDIR, MEDIR»
Hay una frase que dice: “Es difícil mejorar lo que no se puede medir”, de Peter Druker, escrita detrás, en la pantalla. Quizás sea una ley básica de marketing, pero tiene algo de sentido: no podés saber cómo moverte si no sabés qué está pasando.

LA DEMOCRATIZACIÓN EN REDES SOCIALES
Se están democratizando las herramientas de listening. Como dijimos en una nota anterior, un dueño de agencia tiene casi la misma información que vos en tu casa. Y esto repercute en el mundo de la publicidad. “Las agencias chicas les ganan mercado a las grandes”, y esto es porque pueden adaptarse a la información que reciben, al feedback. Es muy difícil caer de un día para el otro en una agencia con trecientas personas y decir: “Muchachos, a partir de mañana nos vamos a manejar distinto”. Imaginate lo distinto que es con diez.

“Lo que vamos a ver son sitios web personalizados”, avisa Bruno Bonafine.

 
CENTRALIZACIÓN DEL MANEJO DE DATOS
Seguro conocés Facebook Connect. Lo has usado múltiples veces para registrarte en una página cuando no te daba ni el tiempo ni las ganas para ingresar un email, una contraseña, otra vez la contraseña, un número en caso de emergencia, una pregunta de seguridad y mil cosas más. Imaginate manejar todo desde ahí. Todos tus datos en un solo lugar llevan a posibilidades bastante interesantes.

“Lo que vamos a ver son sitios web personalizados”, dice Bruno. Imaginate una página que tenga mil versiones: en base a sus gustos, una para cada persona. Las cookies en internet permiten este tipo de cosas —y ya algo te contamos en la nota anterior—: es lo mismo que pasa cuando entrás a una página y te sugiere cosas para ver en base a las cosas que ya viste.

«¿QUÉ SE VIENE?»
• Los formularios de inscripción van a desaparecer. Ya se va a saber quién visita la página desde el minuto cero. En la nota anterior mencionamos que si bien hay algo de invasión a la privacidad hay una mejora en la experiencia del consumidor. Ya internet va a ser una versión de internet específica para cómo sos.

• El contenido va a ser más específico y segmentado, algo que, si lo pensás, es bastante obvio. Ok, muchísimas páginas, una para cada persona. ¿Y ahora qué? Lo mismo, pero en contenido. Muchísimos contenidos, uno para cada persona.

• Desaparecen las búsquedas. Imaginate un mundo en el que el buscador de Google no existe más. Difícil, ¿no? Bruno nos dice que, en el futuro, ya vamos a saber dónde buscar lo que tenemos que buscar. Quizás Google ya lo intuye y por eso tiene muchísimas cosas más que un buscador.

 
(*) Pagar, en porteño clásico.